Elegir un especialista en salud adecuado siempre es una gran responsabilidad. Estamos poniendo nuestra vida en manos de ellos, literalmente, y en el caso de nuestros hijos es particularmente importante elegir bien tomando en cuenta toda la información que podamos obtener.
La razón puede ser porque estamos llegando a una nueva ciudad y no tenemos conocimiento previo o simplemente porque nuestro pediatra se jubilará, o en algunos casos, ya no confiamos en él y su juicio (algo que en ocasiones sucede).
Estos son algunos puntos a considerar para poder elegir de manera inteligente un buen pediatra que se ocupe de nuestros hijos desde su primer día hasta su adolescencia:
- Recomendaciones de nuestras fuentes cercanas.
- Ubicación y horario.
- Realizar una visita.
- ¿Cómo funciona en la práctica médica?
- Confiar en tu instinto.
Vayamos ahora paso a paso con ellos.
Recomendaciones para elegir un pediatra
Existen muchas maneras de elegir recomendaciones sobre pediatría:
- Nuestro primer filtro tienen que ser por supuesto nuestra familia cercana y amigos.
- Si ya tenemos un pediatra y se está jubilando, él mismo nos puede referir con otro.
- Nuestro médico ginecólogo puede ser una buena fuente también.
- Organismos nacionales de pediatría que existen en tu país, ejemplo: Asociación Mexicana de Pediatría, Sociedad Argentina de Pediatría, etc. así como las numerosas asociaciones regionales o estatales en cada país, todos son valiosos en materia de información.
Ubicación y horario
Esto es muy importante a la hora de elegir un buen pediatra, ya que tenemos que garantizar que podemos llegar a su consultorio en corto tiempo en caso de una emergencia y que cuente con estacionamiento para los padres o esté cerca de las líneas de transporte público.
¿El horario de consulta es adecuado para nosotros? ¿Se ajusta al de nuestro trabajo? No dejen de lado esto que puede ser importante.
Realizar una Visita
Ha llegado el momento de visitar a nuestros prospectos y para eso tenemos que realizar un cuestionario que nos sirva de guía para conocerlos. Algunas de las preguntas a considerar son:
- ¿Dónde estudió la carrera de Medicina?
- ¿En dónde la especialidad en Pediatría?
- ¿Cuántos años tiene de experiencia?
- ¿En qué hospital atiende emergencias médicas?
- ¿Está en nuestro grupo de seguro médico familiar?
- ¿Se puede contar con él en caso de emergencias médicas?
- ¿Alguien lo cubre durante sus vacaciones?
¿Cómo Funciona en la Práctica Médica?
Al momento de realizar la visita podemos observar cómo funciona su consultorio. ¿Es amable el personal? ¿Hay quien conteste pequeñas preguntas si no está el doctor, (¿puedo bañar a mi hijo después de darle Paracetamol?, etc.)? ¿Está muy llena su consulta y es probable que le preste poca atención a mi hijo?
Confiar en nuestro instinto
Una vez que examinamos a varios pediatras estamos listos para tomar una decisión y en ella debe pesar todo lo que investigamos. No estamos buscando una persona que sea amable y reparta paletas con una sonrisa, eso es importante, pero también lo es que sea un profesionista que pertenezca a sociedades pediátricas y esté al día con seminarios y congresos para su constante capacitación.
En una decisión como esta, debemos confiar en nuestro instinto de padres y elegir a ese pediatra con el que formaremos un vínculo por muchos años y que se encargará de tener sanos a nuestros hijos.
Conclusión
Tal vez les parezca demasiado todo lo que expusimos en este artículo, pero es solo una guía en la que pueden basarse para elegir a ese pediatra que los acompañará en el desarrollo sano y la prevención o diagnóstico de enfermedades de sus hijos hasta la adolescencia, al final su instinto de padre o madre de familia les dirá qué hacer.